El cobre es el material antimicrobiano más eficaz para las superficies.
Durante miles de años, mucho antes de que se supiera de la existencia de gérmenes o virus, la gente conocía los poderes desinfectantes del cobre.
El primer uso registrado del cobre como agente antiinfeccioso proviene del Papiro de Smith, el documento médico más antiguo conocido de la historia.
Ya en el año 1.600 a. C., los chinos utilizaban monedas de cobre como medicamento para tratar dolores de corazón y de estómago, así como enfermedades de la vejiga.
Y el poder del cobre perdura. El equipo de Keevil revisó las antiguas barandillas de la Grand Central Terminal de Nueva York hace unos años. «El cobre sigue funcionando igual que el día en que se instaló hace más de 100 años», afirma. «Este material es duradero y su efecto antimicrobiano no desaparece».
¿Cómo funciona exactamente?
La composición atómica específica del cobre le confiere un poder destructor adicional. El cobre posee un electrón libre en su orbital externo que participa fácilmente en reacciones de oxidación-reducción (lo que también lo convierte en un buen conductor).
Cuando un microbio impacta sobre el cobre, los iones atacan al patógeno como una avalancha de misiles, impidiendo la respiración celular y perforando la membrana celular o el recubrimiento viral, creando radicales libres que aceleran la destrucción, especialmente en superficies secas. Y lo que es más importante, los iones buscan y destruyen el ADN y el ARN dentro de una bacteria o virus, previniendo las mutaciones que crean superbacterias resistentes a los fármacos.
¿Puede el COVID-19 sobrevivir en superficies de cobre?
Un nuevo estudio descubrió que el SARS-CoV-2, el virus responsable de la pandemia del coronavirus, ya no es infeccioso en el cobre en 4 horas, mientras que puede sobrevivir en superficies de plástico durante 72 horas.
El cobre tiene propiedades antimicrobianas, lo que significa que puede eliminar microorganismos como bacterias y virus. Sin embargo, el microorganismo debe entrar en contacto con el cobre para eliminarse. Esto se conoce como "eliminación por contacto".
Las aplicaciones del cobre antimicrobiano:
Una de las principales aplicaciones del cobre es en hospitales. Las superficies con mayor cantidad de gérmenes en una habitación de hospital (barandillas de cama, botones de llamada, brazos de silla, bandeja, entrada de datos y portasueros) se reemplazaron con componentes de cobre.
En comparación con las habitaciones construidas con materiales tradicionales, se observó una reducción del 83 % en la carga bacteriana en las superficies de las habitaciones con componentes de cobre. Además, las tasas de infección de los pacientes se redujeron en un 58 %.
Los materiales de cobre también pueden ser útiles como superficies antimicrobianas en escuelas, industrias alimentarias, oficinas, hoteles, restaurantes, bancos, etc.
Hora de publicación: 08-jul-2021